Ya
vengo de nuevo con un plato del menú de recetas semanal. El de hoy seguro que gusta a todos, incluso a
los más pequeños de la casa porque posee como ingrediente principal a uno con
el que más disfrutan: la pasta. Con el que disfrutamos todos! porque no conozco
a nadie que no se deleite comiendo un buen plato de espaguetis, raviolis,
macarrones o de las miles de variedades que existen de pasta.
¿Os
apetece una receta con este ingrediente que aporte un poco de diferencia a las
preparaciones más habituales con él? Pues a ver qué os parecen estos Macarrones con bechamel. Una combinación de sabores y salsas tan irresistible que nadie
dejará nada en el plato.
MACARRONES con BECHAMEL
INGREDIENTES (4 personas)
·
400
gramos de macarrones.
·
25
salchichas frescas de cerdo
·
6
trozos de costilla carnosa
·
2
cucharadas de tomate frito
·
1
cebolla pequeña.
·
Queso
para gratinar
·
Agua
·
Aceite
de oliva
·
Sal
Salsa Bechamel
·
250
ml de leche (la que prefieras. Con bebida de avena, sale genial)
·
1
cucharada colmada de harina (de trigo o maíz)
·
Una
nuez de mantequilla (unos 10 g)
·
Una
pizca de sal
·
Nuez
moscada (opcional)
·
Pimienta
negra (opcional)
MACARRONES con BECHAMEL
Sigue la receta paso a paso de los macarrones con bechamel en youtube. No os perdáis detalle para que os salgan perfectos. Si es de tu agrado, NO olvides SUSCRIBIRTE, COMPARTIR y OPINAR.
PREPARACIÓN
PREPARACIÓN
1. Vamos a partir en trozos de
bocado las salchichas y la costilla de tocino. Por supuesto que puedes utilizar
cualquier tipo de carne que te apetezca e incluso puedes picarla para que los
pequeñines y para los que no lo son tanto, se la coman sin rechistar (en casa
tengo un par de ellos).
2. En una cazuela ponemos aceite a
calentar en el que vamos a dorar los huesos de la costilla y la carne. El
tuétano de los huesos sirve genial para espesar y dar sabor a la salsa. Y el
cuatro patas de casa estará la mar de contento con ellos.
3. Sellamos bien la carne y esté
con ese dorado que tanto nos gusta, vamos a agregarle la cebolla que por
supuesto puedes cortarla como prefieras.
4. Cuando la cebolla empiece a
transparentar, le añadimos el tomate frito y rehogamos bien.
5. Aquí es cuando vamos a añadirle
un vaso de agua. Dejamos que hierva bien a fuego medio/bajo hasta que tengamos
una rica salsita. Apagamos y retiramos.
6. Hervimos la pasta al dente en
una olla con agua salada, la escurrimos y la reservamos. No olvides guardar un
poco del líquido de cocción. Vamos a utilizarlo para ligar bien la pasta a
nuestra salsa.
7. Ponemos de nuevo la cazuela con
la salsa al fuego y vertemos en ella, los macarrones escurridos junto con un
par de cucharadas de agua de cocción.
8. Y con paciencia vamos
removiendo hasta conseguir una pasta salseada.
NOTA:
Aquí ya estarían listos para comérselos. De hecho, una parte de estos míos van
para la comida de mañana de unos y para el tupper de la otra. Si te sobran,
congélalos. Quedan la mar de ricos, recalentados.
9. Vamos preparar la salsa
bechamel, que la receta va de macarrones con bechamel.
10. En un cazo ponemos un vaso
grandote de leche, un poco de sal, la mantequilla y la harina de maíz. Sí. Todo
junto. Sin miramientos y todo en frío.
11. Calentamos y vamos dejando se
forme la salsa sin dejar de remover. Cuando adquiera consistencia, paramos el
fuego y seguimos removiendo hasta que deje de burbujear. Así evitamos que se
nos pegue al fondo del cazo. Queremos una consistencia de natilla.
12. Todo listo. Solo queda untar
con una par de cucharadas de bechamel una bandeja apta para el horno, colocarle
tantos macarrones como queramos encima, cubrirlos completamente con más salsa
bechamel y queso, mucho queso.
13. Horneamos hasta que obtener una
capa de queso crujiente y a comer. ¡Qué ya vamos tarde!
14. Ahora en serio. Disfrútalos un
montón y hazlos completamente tuyos según tus propios gustos.
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