MACARRONES CON CHAMPIÑONES Y NATA

"Un amor sin beso es como un macarrón sin queso"




Una cosa si tengo clara. Aunque vayas al mejor restaurante, aunque esten preparados por el mejor cocinero ... nunca, nunca saldrán mejores que los de mi madre.

Y como el rojizo de los macarrones nunca abandona el tapper, hoy vamos a cocinarlos blancos. ¡A ver si así vamos blanqueándolo!




MACARRONES CON CHAMPIÑONES Y NATA GRATINADOS



INGREDIENTES (Para 4 personas)

  • 400 grs de macarrones
  • 1 cebolla dulce
  • 250 grs de champiñones
  • 200 ml de leche evaporado o crema de leche para cocinar
  • 10 grs de mantequilla
  • 1 vaso de caldo de verduras o agua
  • 1 cucharada sopera de cebolleta seca
  • ¼ de cucharadita de estragón seco
  • ½ cucharadita de ajo seco en polvo
  • Aceite de girasol, sal y pimienta
  • Queso rallado para gratinar


PREPARACIÓN

  1. Empezaremos cortando la cebolla en juliana, los champiñones en láminas y cociendo los macarrones según nuestra costumbre e instrucciones del fabricante (yo con un dadito de mantequilla y sal cuando el agua empiece a hervir).
  2. En una cazuela poco honda ponemos la mantequilla y el ajo. Removemos hasta que la mantequilla se haya derretido.
  3. Añadimos la cebolla y sofreímos un par de minutos. Pasado este tiempo, agregamos los champiñones y rehogamos hasta que empiecen a soltar agua que será cuando echaremos la cebolleta a nuestro sofrito. Iremos removiendo para que la cocción sea uniforme.
  4. Pasados unos 5 minutos echamos a nuestro sofrito el vaso de caldo, tapamos nuestra cazuela y dejamos cocinar unos 3 minutos a fuego suave.
  5. Destapamos nuestra cazuela y echamos la leche evaporada y mezclamos bien. Volvemos a tapar y cocinamos 4 minutos más. Id sacudiendo la cazuela un poquito para que so se pegue nuestra salsa que es muy matona.
  6. Pasado este tiempo, destapamos y vamos echando a nuestra cazuela, la pasta que ya estará al dente. LA ECHAMOS DIRECTAMENTE de la olla a la cazuela con la ayuda de una espumadera así el poco de líquido de cocción que añadamos, ayudará a ligar la salsa.
  7. Añadimos un poco de pimienta, mezclamos bien, salteamos un par de minutos para espesar la salsa y los pasamos a una fuente apta para horno.
  8.  Espolvoreamos el queso rallado por encima y gratinamos al horno (180º con calor sólo arriba o en función gratinador).
  9. Listo para emplatar. Espolvoreamos con un poco de cebolleta seca por encima y a comer. ¡Buen provecho!



¡No podréis parar de comer!












       
         


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